Cómo y cuándo fertilizar la vid: gestión de fertilizantes para viñedos
Antes de aplicar cualquier método de fertilización, lo primero que debemos tener en cuenta es la condición del suelo de nuestro viñedo a través de análisis de suelo y de tejidos. No existen dos terrenos iguales y nadie puede aconsejarle sobre métodos de fertilización sin tener en cuenta los resultados del análisis del suelo y de tejidos, así como el historial de cultivo de su campo.
Los métodos de fertilización más utilizados son la fertilización al suelo, la fertilización foliar y la fertirrigación (disolver fertilizantes hidrosolubles dentro del sistema de riego). Hoy en día, la agricultura de precisión utiliza tecnología moderna en el campo y proporcionando a los productores las medidas exactas de lo que necesita cada vid.
Por norma general, al comenzar el período de crecimiento vegetativo, la planta necesita más N para desarrollar la superficie foliar y realizar la fotosíntesis. Durante el crecimiento del fruto, las plantas necesitan potasio para producir uvas bien formadas. El fósforo siempre es necesario, ya que juega un papel fundamental para transportar los nutrientes. Además, durante los primeros años después de la siembra, el fósforo ayuda a la planta a desarrollar un sistema de raíces sano. En muchos casos, las plantas jóvenes instaladas en suelos ácidos no pueden hacer un uso eficiente del fósforo por lo que muchos agricultores aplican P2O5 antes de la siembra. El calcio controla la maduración y la coloración de la fruta y es muy importante para la producción de uvas uniformes.
El primer aporte se suele llevar a cabo a finales del invierno (febrero). Muchos agricultores suministran estiércol bien podrido y aran bien con un subsolador. Un par de semanas después, pueden aplicar urea durante el inicio del período de crecimiento, para ayudar a la planta a desarrollar una mayor superficie foliar. Otros productores, aplican fertilización foliar basada en N. Otros agricultores también aplican fertilizantes granulados equilibrados de liberación lenta (12 - 10 - 20 (+28) + 2MgO + ΤΕ - 500 kg por hectárea - 12 semanas de liberación), durante el inicio del período de crecimiento, para que las plantas puedan absorber los nutrientes de forma gradual. En muchos casos, los productores aplican KNO3 durante la maduración. También se cree que el potasio ayuda a las uvas a adquirir un color rojo intenso. (Tenga en cuenta que 1 hectárea = 2,47 acres = 10,000 metros cuadrados y 1 tonelada = 1000 kg = 2200 lbs).
Algunos agricultores utilizan extractos de algas (Ascophyllum nodosum), mientras que otros aplican fertilización a base de Ca de tamaño nano, especialmente en suelos alcalinos. Un estudio reveló que la aplicación de fertilizantes a base de Ca de nano tamaño condujo a mejoras notables en el desarrollo foliar y la concentración de clorofila de las vides cultivadas en suelos alcalinos. Los extractos de algas también mejoraron el contenido de clorofila Zn foliar de las uvas. Para saber más haga clic aquí.
El tipo y la cantidad de fertilizantes que necesita un viñedo depende de distintos factores. Entre los más importantes destacan el tipo de suelo, la edad de la planta, el sistema de formación, las condiciones ambientales, así como la variedad y el tipo de viñedo. La planta necesita distintos nutrientes durante las diferentes etapas de desarrollo.
Cuando la planta alcanza la madurez, las necesidades de potasio se disparan, mientras que las de nitrógeno son mínimas. Durante esta etapa, la planta aporta sus nutrientes a los frutos para aumentar el contenido de azúcares, así como las sustancias fenólicas y aromáticas.
El momento de la fertilización también puede variar entre viñedos. Por ejemplo, en viñedos de uva para vino de secano, algunos productores prefieren suministrar la cantidad total de fertilizantes durante el invierno como un abonado de cobertera de liberación lenta. En los viñedos de regadío, utilizan el 50% de N y K, junto con el 75% de P y Mg como abonado de cobertera. Aplican el resto de N y P después de la etapa de establecimiento del fruto, y el resto de K se suministra en 3-4 aplicaciones. En zonas con una gran concentración de CaCO3 en el suelo es posible observar una deficiencia de Fe. Por lo tanto, los productores pueden proporcionar formas de hierro quelado, ya sea mediante fertirrigación o mediante aerosoles foliares. La fertilización foliar nos puede ayudar a abordar las deficiencias a corto plazo muy rápidamente. Sin embargo, no suelen sustituir a otros tipos de fertilización. Por lo general, las aplicaciones al suelo tienen efectos más duraderos.
Tenga en cuenta que estas son directrices que no debe seguir sin haber realizado su propia investigación. Cada campo es diferente y tiene diferentes necesidades. Comprobar el estado del suelo y el pH es vital antes de aplicar cualquier método de fertilización. Puede consultar a un agrónomo local autorizado.
Deficiencias de nutrientes y toxicidades en la vid
Nitrógeno: Los síntomas más comunes de deficiencia de nitrógeno en las vides incluyen la clorosis de las hojas inferiores, combinado con un crecimiento bajo y uvas relativamente pequeñas. Por el contrario, la fertilización con N en exceso provocará una elevada tasa de crecimiento y una sobreproducción de brotes, que competirán con fuerza y pueden impedir el crecimiento de los frutos. Como resultado, tendremos uvas de mala calidad con cantidades insuficientes de azúcares, mientras que al mismo tiempo, podría aumentar el contenido de ácidos. Además, un crecimiento en exceso de la vid tiene otra consecuencia negativa. Se produce demasiado follaje, lo que causa sombra y circulación de aire insuficiente. Esto, a su vez, aumentará el riesgo de brotes de enfermedades.
Potasio: la deficiencia de potasio se expresa con clorosis periférica e intervenal del follaje. La deficiencia de K causa problemas significativos para la producción. Los síntomas incluyen disminución de la producción, retraso en la maduración y uvas pequeñas. También puede afectar el contenido de azúcar de la fruta, reduciendo su valor comercial. Por otro lado, unas cantidades excesivas de K pueden provocar una deficiencia de otros nutrientes como Mg o Zn, ya que se trata de elementos que compiten entre sí.
Boro: la falta de boro causa varios problemas en la vid, como la clorosis en las hojas más jóvenes, el follaje desigual y el crecimiento de las bayas, la producción reducida de frutos y la ausencia de semillas en ellos.
Magnesio: el magnesio es absolutamente necesario para la síntesis de azúcares, que juegan el papel más importante en la definición de las características organolépticas únicas de cada uva. La deficiencia de magnesio a menudo aparece debido a la alta ingesta de potasio. También es común en suelos arenosos y ácidos. Los síntomas incluyen clorosis y necrosis de los márgenes de las hojas.
Fósforo: la falta de fósforo no es tan común como la falta de nitrógeno. Sin embargo, aparece a menudo durante períodos fríos, en suelos ácidos o muy alcalinos, pobres en materia orgánica o ricos en hierro. La falta de fósforo se expresa primero a través de pequeños puntos rojos en las hojas. Los síntomas incluyen una disminución de la capacidad fotosintética, la fertilidad y la producción de frutos. Como resultado, las vides producen un rendimiento reducido.
Calcio: es posible una deficiencia de calcio en suelos arenosos, niveles de pH inferiores a 5,5 combinados con una gran sequía o aumento de sodio. Al contrario de lo que sucede con otras deficiencias, una carencia de calcio no se refleja en las hojas, sino en los frutos.
Hierro: podemos observar deficiencia de hierro en suelos alcalinos saturados de agua, con mayores niveles de cobre o manganeso. Los síntomas aparecen principalmente en las hojas más jóvenes, causando clorosis intervenal.
Zinc: la deficiencia de zinc se refleja principalmente en las hojas jóvenes que se vuelven pálidas. También podemos observar asimetrías (una mitad de la hoja es mucho más pequeña y deformada que la otra).
Definición de Viticultura – ¿Qué es la Viticultura?
Beneficios Para la Salud de las Uvas
Información de la Planta de Uva
Como iniciar un negocio de viñedos – como cultivar uva para vino
Decidir sobre las Variedades de Uva
Requerimientos de Suelo y Preparación para el Cultivo de la Vid
Plantación de Vides y Espaciamiento de Plantas – Número de Plantas por Hectárea
Sistemas y Métodos de Entrenamiento de Uvas
Poda de Vid, Defoliación y Raleo
Riego de Uvas y Manejo del Agua
Gestión de fertilizantes para la vid
Plagas y Enfermedades Comunes de la Vid
Vendimia: Cuándo y Cómo Cosechar su Viñedo
Rendimiento de Uva por Hectárea
El uso de la Tecnología en la Viticultura Moderna