Una verdura de herencia o reliquia agrícola, también conocida como vestigio agrícola (heirloom en inglés) son cultivos que se transmiten de generación en generación dentro de una familia, comunidad o región y que, por lo general, existen desde hace más de 50 años. Los agricultores seleccionan con esmero estas variedades a lo largo de muchos años por sus características más apreciadas y son de polinización abierta, conservan sus caracteres genéticos y son “fieles al tipo”. Suelen tener mayor valor nutritivo, se adaptan mejor a las condiciones locales y tienen formas, colores y sabores únicos. Estas variedades cuentan con un significado cultural e histórico inmenso. Sin embargo, la mayoría de ellas han sido sustituidas en todo el mundo por la introducción de variedades híbridas, criadas de forma artificial o modificadas genéticamente. La conservación de estos valiosos germoplasmas y de las tradiciones vinculadas a ellos reviste gran importancia para un futuro sostenible de la agricultura y la seguridad alimentaria.
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