Reducción del desperdicio de alimentos y análisis de datos: Una receta para la sostenibilidad

Reducción del desperdicio de alimentos y análisis de datos: Una receta para la sostenibilidad
Residuos alimentarios

Pranali Yerunkar

Ingeniero de Sistemas Agrícolas/ Biológicos

Compártelo:

Este artículo también está disponible en los siguientes idiomas:

Este artículo también está disponible en los siguientes idiomas: English (Inglés)

Mostrar más traduccionesMostrar menos traducciones

El desperdicio de alimentos es una crisis global que requiere nuestra atención inmediata. Aproximadamente un tercio de todos los alimentos producidos para el consumo humano es desperdiciado, lo que no sólo constituye una preocupación moral y un problema medioambiental y económico. Afortunadamente, el análisis de datos se está convirtiendo en una poderosa herramienta para reducir el desperdicio de alimentos. Aprovechando el poder de los datos, podemos identificar y abordar las causas profundas del desperdicio de alimentos en toda la cadena de suministro, desde la granja hasta la mesa.

El problema global del desperdicio de alimentos

Para comprender la magnitud del problema del desperdicio de alimentos analicemos esta preocupante estadística: Cada año se desperdician 1.300 millones de toneladas de alimentos, lo que equivale a 795 kilogramos por persona y año. Este desperdicio tiene consecuencias nefastas ya que contribuye al cambio climático por las emisiones de metano, contamina los recursos hídricos y desperdicia tierra, agua y energía. Además, supone una carga anual de 1 billón de dólares aproximadamente para la economía mundial.

Reducción del desperdicio de alimentos y análisis de datos: Una receta para la sostenibilidad

Análisis de datos: la clave del cambio

En la lucha contra el desperdicio de alimentos, el análisis de datos desempeña un papel fundamental. A continuación explicamos cómo cada una de las partes involucradas pueden aprovechar los datos para reducir el desperdicio de alimentos:

Las empresas: El análisis de datos puede cambiar las reglas del juego de las empresas del sector alimentario. El analisis de datos permite localizar el desperdicio de alimentos en cada una de las fases de sus cadenas de suministro, desde la producción y la transformación hasta la distribución y la venta al por menor. Con esta información, las empresas son capaces de detectar demoras e ineficiencias lo que les permite tomar decisiones más informadas sobre la producción y la gestión de inventarios. Por ejemplo, un supermercado puede utilizar el análisis de datos para determinar cuáles son los productos con más probabilidades de desperdicio y ajustar sus prácticas de almacenamiento al respecto.

Gobiernos: Los gobiernos pueden utilizar el análisis de datos para diseñar políticas y programas que detengan el desperdicio de alimentos. Analizando los datos pueden identificar qué productos suelen desperdiciar los consumidores más a menudo y desarrollar campañas de educación pública para fomentar el consumo responsable. Los gobiernos también pueden hacer un seguimiento de los avances en la reducción de estos desperdicios a través de los datos lo que les permitirá intervenir cuando sea necesario.

Consumidores: El uso de los análisis de datos no es algo limitado a empresas y gobiernos; los consumidores también pueden utilizarlo para reducir el desperdicio de alimentos. Existen aplicaciones para teléfonos móviles diseñadas con este fin y desde ellas es posible realizar un seguimiento de lo que se gasta y de los alimentos que se desperdician. Con esta información, las personas pueden tomar decisiones más conscientes sobre cómo consumen los alimentos, aprender a comprar menos y a planificar las comidas de una manera más eficiente.

Conclusión

El análisis de datos es una herramienta poderosa que ofrece la posibilidad dedar pasos significativos hacia la reducción del desperdicio de alimentos en todos los niveles del sistema alimentario. Recopilando y analizando los datos sobre y actuando en consecuencia, las empresas, los gobiernos y los consumidores pueden identificar las fuentes de desperdicio y desarrollar estrategias específicas para minimizarlo. Además de los beneficios medioambientales y económicos, la reducción del desperdicio de alimentos mejora la seguridad alimentaria, garantizando que más personas tengan acceso al sustento que necesitan. A medida que avancemos, adoptemos el análisis de datos como ingrediente principal de nuestra receta para un futuro alimentario más sostenible y equitativo.

NUESTROS SOCIOS

Unimos fuerzas con O.N.G., universidades y otras organizaciones a nivel mundial para cumplir nuestra misión común en materia de sostenibilidad y bienestar humano.